El día de hoy llegó a la ciudad
de Chihuahua la caravana integrada por los padres, hermanos y familiares de
nuestros compañeros asesinados el 22 de octubre de 2012. En esta manifestación
también participaron cientos de barzonistas del Ejido Benito Juárez, municipio
de Buenaventura y de otros municipios de la entidad. Los barzonistas realizamos
una protesta pacífica para exigir el esclarecimiento y castigo del asesinato de
Ismael Solorio y Manuelita Solís. Este crimen fue cometido hace dos años y a
pesar del compromiso y la palabra del Gobernador por hacer justicia, hasta estos momentos no hay
ningún detenido y a nadie se ha procesado ni política ni penalmente. La
impunidad es la única respuesta que hemos recibido de parte de las autoridades
estatales.
La manifestación que realizamos
fue total y enteramente pacífica. El gobierno del estado montó una provocación
al golpear a dos compañeros. Uno de ellos el hijo menor de Ismael y Manuelita
quien cuenta con medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos y quien junto con el otro joven, se encontraban instalando una
manta en el Palacio de Gobierno. Posteriormente un grupo de guardias y de
policías que se encontraban al interior de dicho inmueble, se dedicaron a
agredir a un grupo de barzonistas que recurrió a defender a los dos compañeros
que se encontraban golpeados y en manos de los guardias de seguridad.
Hasta estos momentos hemos tenido
dos entrevistas con el Secretario de Gobierno donde le hemos manifestado
nuestra inconformidad y descontento por el incumplimiento de la promesa del
Gobernador para hacer justicia en el crimen de nuestros compañeros y detener a
los responsables materiales e intelectuales. El Secretario de Gobierno ha aceptado que en el expediente se encuentran
plenamente identificados los participantes en este asesinato y que
reiteradamente dichos individuos han sido ubicados y ha reconocido la
incapacidad de los cuerpos policiacos
para realizar la detención. El Secretario nos manifestó que al igual que
nosotros, también el Gobernador está descontento y volvió a reiterar el
compromiso de que la detención se pudiera realizar lo más pronto posible.
El problema más grave es que no
nos dan ninguna certeza para instrumentar las medidas y programas de seguridad
necesarios, de tal manera que dicha detención en verdad se pueda realizar. Nos
preocupa que sea una promesa más y que pasen nuevamente un año o muchos meses
sin que la familia y la sociedad chihuahuense veamos esclarecido este crimen y
castigar a los responsables. Más aún, nos indigna la creciente impunidad que
este y muchos otros casos avergüenzan a todos los chihuahuenses.
Por nuestra parte, también le
manifestamos al señor Secretario de Gobierno nuestra inconformidad por la
violencia con que fueron tratados nuestros compañeros y por el despliegue
exagerado de policías estatales y de grupos especiales de seguridad para
enfrentar una manifestación totalmente pacífica. Le reiteramos también que no
aceptábamos que continuara este clima de agresión y hostigamiento contra los
miembros de El Barzón y las otras organizaciones participantes. Al final de
cuentas sostuvimos nuestra disposición al diálogo para encontrar, lo más pronto
posible, que se nos haga justicia.
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